No te odio, ni lo haré nunca. Solo finjo odiarte porque es mas fácil que admitirme a mi misma que te sigo echando de menos

21 julio 2011

- Y ¿Cómo se siente este cambio?
- Es como volver  aprender  andar en bicicleta. Es algo que nunca te olvidas pero también sentís miedo de subirte, de caerte, de no poder lograrlo. De todas formas,
todo se trata de intentarlo las veces que sean